El concepto, lugar elegido, letra y las imágenes con las cuales juega, constituyen un acto de violencia escudado en un musical, que luego expuesto en la normalidad que brinda la realidad digital logra imprimir inocencia al hecho, pero,  en su conjunto el video clip deja claro desde su concepción, producción y realización la voluntad y deseo de causar daño a la fe y a sus seguidores, sin que excuse la apreciación del deán de la catedral, quien con su conducta y explicaciones demuestra usurpar la sotana, como la usurpan muchos otros hombres que la visten movidos por intereses pasionales y/o económicos, mas no son seguidores de Cristo, no son hombres de fe aun cuando vistan de sotana. Su conducta plantea otra discusión por darse: los falsos sacerdotes.

El video clip constituye un bulín (bulyng) a la fe de millones de hombres al profanar el Templo, la casa de Dios que es rostro fundamental del cristianismo, donde el creyente conversa en intimidad con Dios, lugar reservado a la práctica de rituales que construyen comunidad en la fe.

C. Tangana y sus cómplices, el deán entre ellos, desafían cara a cara al cristianismo en la seguridad que no existirá una respuesta violenta, validos de conocer el sentido de la caridad y bondad cristiana como fundamento del perdón, por ello, solo un Templo cristiano consideraron con certeza; nunca imaginaron hacerlo en una mezquita, lugar sagrado para otros creyentes que dan sentido distinto a la bondad y caridad, cuya respuesta expresan de otras maneras. La premeditación, cobardía y prevaricación se dejan ver.

Recurre el Deán de la Catedral Primada de Toledo sin arrepentimiento, al argumento preferido por quienes esconden sus complejos o frustraciones, el argumento de existencia de intolerancia en los otros, mostrándose progresista y de cultural superior, pero, el respeto  tolerancia al pensamiento distinto tiene límites que fija la responsabilidad, lo contrario es estupidez o simple manipulación para ocultar los verdaderos intereses que mueven la voluntad, y, el deán de la Catedral al usarlo como alegato, refiriendo que el video clip narra una conversión desde el amor, acentúa la burla, desprecio e irrespeto por la feligresía, desprecio que resalta al permitir la profanación del Templo. Su conducta plantea una discusión dormida, la de descubrir los verdaderos servidores para separar la paja del trigo en la Iglesia.

C. Tangana pudo expresar su pensamiento sin ofender ni violentar el pensamiento del otro, del creyente. Con esta manera de actuar deja evidente no reconocer ni apreciar los valores y cualidades del otro, no lo respeta, busca imponer su pensamiento sobre el pensamiento y la verdad de esos otros, a quienes borra y desecha al dar invisibilidad y no importarle lo diferente, expresa de esta forma desprecio por los creyentes, pretendiendo hacerlos idénticos, imponer la igualdad del pensamiento al otro, es una expresión totalitaria para ocupar el todo e imponer su verdad como valor superior y única.

Proyectar de esta manera su yo en el otro es en esencia totalitarismo, dado que observa al otro desde su yo constitutivo al percibirlo desde su propio ser, pensamiento o visión, sin importarle ni entender, que el otro es sencillamente otro, le niega su esencia, ser una alteridad distinta con dignidad y pensamiento propio,  su conducta constituye por ello, una expresión violenta de poder que desconoce el respeto por el otro, por la diferencia, desconocimiento que le permite violentar sus derechos, irrespetar la dignidad humana de esa otredad, la cual, pretende ridiculizar con su burla.

Su mensaje consistente en resaltar la no importancia de ese otro, del cristiano, considerándole un ser desechable, es una conducta sin responsabilidad, y, al no existir responsabilidad no existe el límite, de esta manera todo es posible, todo es permitido, es este el pensamiento justificante de los campos de concentración nazi, de los gulag soviéticos, de los fusilamientos masivos rusos, chinos y/o cubanos, es el final de todos aquellos que resisten la identidad o igualdad a imponer desde el poder para lograr su justicia social. Es la cultura de la cancelación de la modernidad. Es el fusilamiento digital.

Conductas como estas, constituyen lo medular del ataque a la cultura de Occidente, es la pretensión de imponer una visión distinta sobre el modo de vida del hombre que hoy se realiza desde varios ángulos y métodos, sobre la farsa del revisionismo, pero, en sí, todos constituyen acciones violentas de ocupación de espacios, físicos o de ideas, todos pretenden expulsar lo distinto, trayendo, imponiendo y enseñoreando aquello que parece, desean dejar atrás, pero que replican en el lugar de acogida, transformando su movilidad y/o conducta en una invasión que debe ser confrontada y rechazada, un forastero debe respetar y adaptarse, manteniendo su personalidad, al modo de vida de aquellos que abren sus casas para darle cobijo y saciar su hambre y su sed.

¡Por ahora Chao … Maricarmen!!

@PeterPaezMonzon