Accidente
Y al fin el accidente inesperado,
el golpe oscuro de la desventura,
el ciego encontronazo, la segura
clara certeza de que te han matado.
El tiempo transcurrido, el resbalado
de la vida entramada a la locura,
la noche abierta, el cielo sin mesura,
con la certeza de que te han matado.
Venir del aire, el mar, de los jardines,
de atravesar dichoso los confines,
y siempre en vilo al alba confiado.
Verterse en tierra, ya vencido el viento
entrando al cotidiano pavimento
con la certeza de que te han matado.